El marketing de contenidos es uno de los que más se actualiza en el mundo de Internet. Suelen referirse a él con la frase «El contenido es el rey». El contenido es una herramienta que no solo informa, sino que fortalece una imagen de la marca en el consumidor.
Algunos hasta estiman que el marketing de contenidos es la herramienta más útil a la hora de posicionarse. Esto es debido a su capacidad de formar bases para la conversación con el cliente, mediante la correcta comunicación y manejo de información.
No hay que olvidar que todo esto es un proceso estratégico, con todo lo que este implica. Determinar la efectividad de su aplicación sigue ciertos parámetros:
El primer paso del marketing de contenidos: conocer a tu audiencia
No puedes transmitir un mensaje eficaz si en primer lugar no conoces a quién va dirigido. Esta audiencia a la que apuntas será el foco de atención durante todo el proceso.
Al estilo de cualquier campaña, esta audiencia debe segmentarse por sexo, edad, ubicación e intereses. Esto se debe a que permite ampliar la lista de temas y elementos de los que disponer.
Recuerda también que la comunicación que se aplique a cada momento dependerá de a qué segmento de tu audiencia te diriges.
Si eres original
Es menos eficaz el contenido que publicas si es idéntico o muy parecido al del resto. De todo el proceso, esta es la parte que demanda más creatividad.
En caso de buscar posicionar tu marca, debes conocer las fortalezas y debilidades de esta, tal cual conoces a tu audiencia. No te olvides, hay diferentes formas de comunicar un mensaje.
Si sabes llamar la atención
No vivimos en una telenovela o diario amarillista. Sin embargo, hay marcas que confunden la «intriga» con el «drama». Antes que nada, si exageras tu contenido (como el título, por ejemplo) traes consecuencias negativas.
Es fácil perder seguidores si buscas abusar de su curiosidad o empatía. Es tan dañino como crear información falsa.
Tu contenido es variado
A la gente le aburre mucho texto. Hay formatos diferentes, como los videos y las imágenes que comunican bastante mejor la información.
La gente de tu audiencia tiene diferentes necesidades: motivación, entretenimiento, descubrimiento de cosas nuevas, información de la marca. Es en base a estas necesidades a las que apuntas con estos formatos variados.
Aplicas bien lo que marca el SEO
No es cuestión de publicar a cada rato. Ser constante debe ir acompañado con un contenido impecable y armado de forma inteligente.
El SEO (optimización de buscadores) es el proceso que refuerza la visibilidad de un sitio web en los resultados orgánicos de un buscador (no pagados).
Usar imágenes, tener un título no repetitivo con las palabras precisas, palabras claves, entre otros elementos componen lo que es el SEO. No te olvides que las páginas que se conectan tienen ventaja.
Mediante enlaces web, puedes dar a conocer más de tu marca (enlaces internos) o ampliar los conocimientos mostrados (enlaces externos).
Por último, el sitio web debe estar bien constituido y ser de fácil acceso para no agobiar a quienes te buscan por Internet.
No te quedas en solo publicar
Una campaña se echa a perder si no se hace seguimiento constante de sus resultados. La forma perfecta de determinar si tu contenido es efectivo es mediante el alcance del mismo.
Páginas como Facebook te brindan métricas para determinar dicho alcance. La naturaleza de este alcance se ve determinada por las reacciones de tu audiencia. Si las reacciones son negativas, es hora de mejorar el contenido que creas.
Si te interesa este tipo de contenido o quieres saber cómo orientar un buen uso de Facebook para el éxito de tu negocio, inscríbete en nuestro taller de Facebook para negocios. Para mayor información, ingresa a la página de nuestro curso: https://www.limawell.edu.pe/curso-taller-de-publicidad-en-facebook-para-negocios/
